Dolor de espalda: ¿cuándo consultar a un fisioterapeuta?

El dolor de espalda y la fisioterapia, una combinación bien conocida

El dolor de espalda en fisioterapia es un motivo de consulta muy común entre estos profesionales de la salud. Generalmente es benigno y de corta duración, pero en algunas personas puede volverse más persistente y afectar significativamente su bienestar, incluso impidiéndoles realizar sus actividades diarias.

Independientemente de su duración e intensidad, es normal sentir cierta preocupación cuando aparece un dolor en la espalda. ¡Pero no hay que alarmarse! La implementación de ejercicios sencillos y la adopción de buenas prácticas suelen ser suficientes para solucionar el problema. Para saber si es necesario acudir a la fisioterapia, el equipo de Fisioterapia174 aclara el tema y te da sus consejos en este artículo. Ante un dolor de espalda persistente y sin patologías específicas, ¿cómo saber cuándo es necesario consultar a un fisioterapeuta? ¿Cuál es la causa más frecuente de estos dolores y cómo prevenirlos? ¡Descúbrelo a continuación!

¿Debes consultar de inmediato a un fisioterapeuta por tu dolor de espalda?

 

¿Qué hacer ante un dolor de espalda reciente y moderado?

En la mayoría de los casos, el término « dolor de espalda » utilizado por los pacientes se refiere a la lumbalgia, que se manifiesta con molestias en las vértebras lumbares, es decir, en la parte baja de la espalda. Sus causas pueden ser múltiples y algunos factores favorecen su aparición, como el sedentarismo, el estrés, la tensión muscular, una mala postura o incluso dormir en un colchón demasiado viejo. En el caso de una lumbalgia, adoptar buenas prácticas puede ayudar a una recuperación rápida y a recuperar tu bienestar.

Si experimentas un dolor de espalda moderado y reciente, antes de acudir a un fisioterapeuta, puedes comenzar practicando regularmente una actividad física suave. Ya sea yoga, caminata rápida, natación o incluso nuestras excelentes clases de Pilates en Palma de Mallorca, tus sesiones te permitirán:

  • Estirar todos los músculos de tu espalda.
  • Fortalecer suavemente la musculatura dorsal.
  • Mejorar tu postura.
  • Activar tus articulaciones.
  • Desarrollar tu flexibilidad.

La regla de oro es evitar actividades bruscas o de alto impacto. Si sufres de lumbalgia, evita practicar squash, montar a caballo o jugar un partido de fútbol. Además, trata de mantener una buena postura durante el día y evita levantar objetos pesados o realizar movimientos que puedan ser perjudiciales para tu columna vertebral.

Notarás los beneficios de estos hábitos rápidamente, lo que, esperamos, te motivará a continuar con tu actividad física… ¡y a evitar sesiones de fisioterapia!

La fisioterapia, una solución cuando el dolor de espalda persiste

Si la lumbalgia se prolonga, es decir, si el dolor de espalda persiste durante más de 4 semanas a pesar de seguir las recomendaciones mencionadas, es recomendable acudir a un fisioterapeuta. Por supuesto, no dudes en consultar a un médico antes de este período si notas un empeoramiento de tu dolor de espalda o si aparecen otros síntomas: un cambio repentino en tu estado físico debe ser una señal de alerta.

En caso de un dolor de espalda persistente, presente durante 4 a 6 semanas, un fisioterapeuta podrá definir el tratamiento más adecuado según la causa de tu dolor de espalda y tu capacidad física.

Diferentes enfoques de la fisioterapia para el dolor de espalda

En fisioterapia, el tratamiento del dolor de espalda puede adoptar diferentes formas. Durante las sesiones, el tratamiento puede incluir:

  • Masajes, que ayudan a eliminar la tensión y relajar los músculos.
  • Ejercicios de fortalecimiento muscular específicos, a veces con accesorios como bandas elásticas, pelotas de gimnasia o pesas.
  • Movimientos y técnicas fisioterapéuticas diseñadas para aliviar el dolor.
  • Estiramientos de los músculos de la columna vertebral para relajarla de forma suave.

Los resultados suelen ser visibles en poco tiempo. Además, uno de los grandes beneficios de la fisioterapia es que permite a los profesionales de la salud enseñarte los hábitos correctos para evitar la reaparición del dolor de espalda. Gracias a un seguimiento personalizado para cada paciente, podemos brindarte consejos prácticos que se adapten a tu estilo de vida y necesidades. Objetivo: ¡deshacerte de la lumbalgia de manera duradera!

Consejos preventivos para evitar la lumbalgia… ¡y la fisioterapia!

La prevención es el mejor tratamiento, por lo que aquí te damos algunos consejos clave que pueden ayudarte a evitar la reaparición del dolor de espalda. Uno de los mejores hábitos que puedes adoptar es mejorar tu postura. En el trabajo, en el transporte público, mientras comes… Al principio puede costarte un poco, pero con el tiempo lo harás de manera natural sin esfuerzo. Como resultado, fortalecerás tu core y mejorarás tu bienestar general.

Actividad física regular: la mejor receta contra el dolor de espalda

Una vez finalizadas tus sesiones de fisioterapia tras un dolor de espalda persistente, podrás retomar tu actividad física favorita sin restricciones. Dependiendo de la disciplina que practiques, te recomendamos invertir en material deportivo de buena calidad y en equipos diseñados específicamente para el bienestar corporal, como:

  • Ropa con bolsillos accesibles que eviten movimientos innecesarios.
  • Calzado de senderismo, running o trail adecuado a la forma de tu pie y a tus necesidades biomecánicas.
  • Pesas ergonómicas que respeten tu capacidad física.

Tomar estas precauciones reduce el riesgo de lesiones… ¡y de volver al fisioterapeuta!

Los estiramientos, una rutina esencial contra el dolor de espalda

La fisioterapia recomienda realizar estiramientos regularmente para combatir el dolor de espalda ocasional, la lumbalgia persistente y otras molestias cotidianas que afectan tu estado físico. Desde la postura del perro hasta el ejercicio del cobra, existen muchas técnicas que pueden aliviar de forma duradera el dolor de espalda. Lo ideal es aprenderlas con un profesional, como parte de un tratamiento de fisioterapia, y luego practicarlas en casa según te convenga. Así, adoptarás la postura correcta desde el principio y reducirás el riesgo de lesiones. ¡Un hábito del que pronto no podrás prescindir!

Si tu dolor de espalda te preocupa y parece prolongarse a pesar de tus esfuerzos por aliviarlo, no dudes en contactar a tu especialista. En nuestro centro de fisioterapia en Palma de Mallorca, cada paciente recibe un acompañamiento personalizado y un tratamiento a medida: la clave para una evolución efectiva en cada sesión y un alivio duradero.

 

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